martes, 20 de octubre de 2009

Comunicado de Prensa

Diversos sectores de la sociedad civil, organizaciones políticas y sociales han repudiado todo acto de violencia en la Argentina. Desde mayo de 2003 el mismo kirchnerismo dejó de judicializar la protesta, permitiendo las movilizaciones y reclamos de los ciudadanos. Ante hechos trágicos acontecidos en gobiernos antecesores desterró de la práctica cotidiana el empleo de los aparatos represivos del Estado.

Los militantes del proyecto nacional y popular salimos a desmentir las tergiversaciones del comunicado de la Unión Cívica Radical, por falaz y malintencionado, y alertamos a los vecinos y vecinas que las apreciaciones vertidas se encuentran en consonancia con los discursos fraudulentos difundidos reiteradamente a través de los monopolios mediáticos.

Llama mucho la atención la preocupación de los dirigentes Radicales de La Pampa y que le endilguen el clima enrarecido al Gobierno Nacional, puesto que guardaron silencio ante el lock out propuesto por la Mesa de Enlace en el conflicto de la resolución 125, donde la misma patronal agraria se arrogó, además de agresiones varias, el poder de gendarme y policía, hecho a toda vista escandaloso (imaginarse si algún movimiento social en protesta se pusiera a parar y revisar vehículos...); ni siquiera se solidarizaron con los comprovincianos que fueron vituperados y lesionados en nuestras rutas ni con el intendente de Trenque Lauquen, Dr. Jorge Barrachia (de militancia radical), o el diputado Agustín Rossi en Santa Fe. Todos atacados por la violencia de las patotas sojeras que el radicalismo pampeano pareciera defender. Tampoco condenaron la agresión a nuestro gobernador cuando un grupo lo interceptó en la ruta cercana al Aeropuerto el año pasado, ni la falta de respeto demostrada en un acto oficial de la Sociedad Rural a la que habían sido invitadas las autoridades.
No han manifestado opinión respecto a las acciones amedrentadoras en los desalojos pergeñados en la madrugada por la Unidad de Control del Espacio Público (UCEP) en la Ciudad Autónoma, mucho menos de la violencia psicológica ejercida por espías contratados por Mauricio Macri para perseguir e identificar a docentes y alumnos; qué decir de la violencia semiótica de los multimedios, a los cuales los radicales le defendieron sus intereses en el Congreso de la Nación; y para cerrar esta sumatoria, habría que destacar las fallidas y compulsivas descalificaciones personales de la republicana Elisa Carrió. Claro, lo que pasa que todo ese arco político es "pro"; en cambio, los peronistas, son y representan ante el establishment burgués el aluvión zoológico, los cabecitas negras, casi bárbaros y tan bocasucias como Maradona.

El sedimento de la lectura del comunicado mañoso de la UCR nos recuerda aquella nominación inaugural que hiciera la Unión Democrática: "Cerraremos definitivamente el paso a las hordas que agravian la cultura convertidos en agentes de una dictadura imposible…"; Lilita, que integra el Acuerdo Cívico y Social, del que forma parte el Frepam, donde militan, supuestamente, los radicales, se ha cansado de despotricar sobre el fascismo y el autoritarismo de los Kirchner… cuando la realidad muestra y demuestra no sólo lo contrario sino los cambios integrales que se han dado en cada uno de los mandatos de Néstor y Cristina. Acaso la política de Derechos Humanos es una entelequia, la creación de fuentes de trabajo, el aumento de las jubilaciones, la recuperación de las AFJP, Aerolíneas, la sanción de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual.

Llamamos a la reflexión y a la discusión democrática de las ideas que redunden en políticas de Estado concretas, como fue en La Pampa los aportes y discusión de la Ley de Educación, donde primó el ejemplo sano para el intercambio cuando los intereses de la Patria están primero.
Los proyectos de Nación encarnados por los kirchneristas, que reconocen los aportes del ideal yrigoyenista y de Forja, y los radicales conservadores se contrastan en el modo de dirimir los conflictos sociales, y la historia pone en evidencia esas contradicciones. Entonces, es una hipocresía achacarle al Gobierno Nacional una violencia que no es real, que es distorsionada por las empresas periodísticas concentradas, y de la que sí cuadros políticos de la UCR han sido célebres protagonistas.

Movimiento Nacional y Popular de La Pampa
Movimiento Evita de La Pampa

1 comentario:

Anónimo dijo...

Compañeros, La Pampa Peronista adhiere a este comunicado.