Fotografía: Plan B Noticias
Los triunfos políticos no son azarosos. La política tiene
espacio y tiempo para su ejecución y para la concreción de sus acciones. Los
liderazgos también se construyen, así como las organizaciones que sustentan los
proyectos.
Juan Domingo Perón había señalado que "sólo la
organización vence al tiempo"; y en dicha cita está sintetizada gran parte
de la ciencia política, pues la organización misma articula la política, es la estructura central que crece
desde lo cualitativo a lo cuantitativo, y es el único modo de armar un destino
político colectivo con unidad de acción y concepción.
Néstor Fabián Avendaño (integrante del Movimiento Evita) encabezó
la lista 3 que se impuso en las elecciones en el barrio Santa María de La
Pampa. El compromiso militante de un grupo de compañeros y compañeras de base
se sobrepuso a los aparatos como a las prebendas en una elección altamente
politizada. Estos compañeros y compañeras demostraron en el campo de la
realidad (que es la única verdad) cómo se cumplen los objetivos que han sido
trazados por los cuadros políticos.
La plataforma que se ofreció a
los vecinos y vecinas es la guía de la acción política y el contrato social que
se asumirá, de ahora en adelante, al decidir el mejor destino del barrio.
No es azaroso el triunfo político.
Más allá de las campañas publicitarias, del marketing, de los sondeos de
opinión, de las encuestas, también existen los candidatos naturales; y a ese
requisito indispensable no lo tuvieron en cuenta los propulsores de las otras
listas. "Taperita" Avendaño ya había ganado en dos oportunidades la
comisión vecinal del barrio Matadero. Esta nueva conquista rubrica que la
militancia, la lealtad y el respeto hacia los vecinos por parte de Avendaño,
hace que se lo pondere y vote por sus condiciones intrínsecas de conductor
político.
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